Cuando una organización decide invertir en el desarrollo y puesta en marcha de un plan de continuidad de negocio, lo hace con el deseo y la esperanza de no tener que utilizarlo nunca. Sin embargo, el incendio del pasado mes de febrero en el edificio Windsor de Madrid, puso a prueba el plan de continuidad de negocio de la primera firma de servicios profesionales de España. En este momento, las operaciones de Deloitte se encuentran a pleno rendimiento, los sistemas funcionan con normalidad, no se ha perdido información en formato digital, y las copias de respaldo se han recuperado sin problemas y en los plazos establecidos. Un importante esfuerzo por parte de los empleados, de proveedores y el enorme apoyo recibido por parte de clientes y empresas, ha sido decisivo para lograr la continuidad de toda la actividad de Deloitte: el plan ha funcionado.
